¡El cliente pensó que era un negocio y nosotros nunca!
Los hermanos Melgar y la Veggie Pizza

Los exalumnos Mario y Juan Francisco y sus hermanos Jose y Miguel Melgar han incursionado exitosamente en la gastronomía peruana al ofrecer pizzas y bebidas lo más natural y sano posible. La masa está elaborada a mano, con germen y salvado de trigo, linaza, sal de maras y romero y las pizzas están acompañadas por un queso mozzarella bajo en grasas y muchas combinaciones de verduras muy poco vistas en el Perú. ¿Quién comería palta en una pizza? Pues sí, vale la pena probar y beber combinaciones de jugos fuera de lo común.

Mientras que nosotros disfrutamos de la pizza, Mario nos cuenta cómo surgió

Vivía en Copenhague y, además del trabajo, disfrutaba de la vida comiendo comida chatarra, gaseosas y dulces. Sin darme cuenta, llegué a pesar 111 kilos. Me comenzó a doler la columna y fui al médico quien me indicó que tenía diabetes, colesterol en las nubes, problemas cardíacos y el sistema nervioso por colapsar. Como buen europeo me dijo sin rodeos que si seguía en este ritmo me quedarían 5 años de vida y que el daño a mi columna sería irreversible. Así de sencillo y fuerte a la vez. Necesitaba hacer un cambio radical, pero no sabía cómo empezar. Comencé a investigar sobre nutrición y definitivamente no volvería a comer azúcar blanca, carnes rojas, alimentos procesados y gaseosas.

Decidí regresar a Lima para vivir con mis hermanos y fueron ellos quienes, preocupados por mi salud, me obligaron a ir al gimnasio con ellos y a comer sano. Un domingo insistí en comer una pizza y, como me cuidaban, decidieron preparar una baja en calorías. Mi hermano José es Chef y Miguel es trofólogo, entonces hallaron la fórmula perfecta. Una pizza con una masa hecha en base a germen y salvado de trigo; en casa había aguaymanto, albahaca y tomates cherry de sabor exquisito y fresco. Así nació Veggie Pizza. Fue tan rica que cuando venían amigos a casa preparábamos esa pizza. Les encantaba. Un día una amiga nos preguntó si podíamos preparar pizza para una velada en su casa. Las preparamos como diversión y las llevamos como cuando uno lleva algo para picar a casa de un amigo. Fueron un éxito. Nos querían pagar por las pizzas, pero nosotros no habíamos pensado en venderlas. Uno le pasó la voz al otro y comenzamos a ir con un hornito de casa en casa. El público objetivo se formó solito. La demanda se incrementó rápidamente y para cubrirla fue necesario tener ya un local fijo. Encontramos un jardín abandonado de una casa en el mágico distrito de Barranco y mi tercer hermano Juanfran, quien estudió administración y fotografía y tiene un ojo de artista, se hizo cargo de la ambientación y de las relaciones públicas. Usó el Facebook y el Twitter y con el apoyo de todos nuestros amigos y la visita inesperada de Gastón Acurio, hoy en día tenemos tres locales.

Desde entonces trabajamos los cuatro hermanos; cada uno en su especialidad. Luego de terminar la secundaria, estudié en el Instituto, en esa época Middendorff, hoy el BBZ Humboldt, la carrera de Comercio y Producción, mientras que mi hermano Juan Francisco estudió Comercio Internacional. Esto nos dio la base para gestionar el restaurante. Recuerdo la frase del Sr. Ufermann, mi profesor y director en el Instituto, quien decía que las empresas no quiebran por falta de rentabilidad sino por falta de liquidez. Y efectivamente, mis negocios anteriores quebraron por falta de liquidez, mientras que Veggie Pizza tiene una liquidez diaria que permite que el negocio fluya como tal.

Nuestro éxito radica en los ingredientes, siempre frescos y de la mejor calidad. No ahorramos en la calidad para tener mayor margen. Lo que estamos haciendo para no tener sobrecostos es comprarle directamente al productor. Hemos viajado por varias ciudades del Perú y armado una red de proveedores que por un lado nos aseguran productos frescos y de calidad y por otro, nos permite apoyar directamente al campesino, muchas veces explotado por el intermediario.

La demanda es tal, que un empresario reconocido nos preparó un plan de expansión para los siguientes dos años y va a invertir en locales en Chile, Miami y Holanda, lugares donde tenemos garantizados la adquisición de las frutas y verduras. Sin embargo, al crecer ya tanto se creó un directorio, contratamos a un gerente general especializado en restaurantes, mientras que nosotros, los hermanos Melgar, nos encargamos de velar por la calidad de nuestros productos y seguimos con la investigación de nuevas combinaciones. Le agregamos jugos naturales y aguas frutadas y postres crudi-veganos, hechos solo con frutas frescas y frutos secos orgánicos. El postre de chocolate por ejemplo no tiene azúcar ni manteca y es crudo, una delicia sana.

Veggie Pizza no nació como un negocio, simplemente fluyó debido a nuestra convicción de que tenemos que alimentarnos adecuadamente y el networking que, en gran parte, proviene del Humboldt.

Im Norden, im Süden, wo es nur immer ist,
vergiss nie, dass du ein Humboldtschüler bist.