Susana Arnáiz abogada especialista en derecho civil y comercial
Estudié la carrera de Derecho en la Universidad Católica del Perú, más por presión familiar que por convicción. Estudios Generales fue una experiencia durísima: pensé que nunca llegaría a la facultad. Lograrlo trajo como premio, el hecho de que la facultad me resultara fascinante y además, fácil. Desarrollé el gusto por leer – sin el cual no hay forma de estudiar esta carrera – y, aún muchos años después de haber salido de la universidad, recuerdo con nitidez gran cantidad de las clases dictadas por profesores brillantes con los que tuve la oportunidad de aprender.
Trabajar resultó difícil inicialmente, ya que fui mamá muy joven y mis padres (que podrían haberme ayudado con mis hijos) vivían en el extranjero. Cuando los chicos fueron al colegio y al nido, a insistencia del estudio de abogados Peña & Faura Asesores y Consultores que necesitaba urgentemente una abogada que hablara alemán, acepté trabajar a tiempo parcial. Tengo la suerte de laborar desde hace 24 años a medio tiempo en temas de derecho civil y comercial, asesorando empresas en los diferentes temas con sus clientes, proveedores, trabajadores, directores y accionistas. Trabajar en esos temas me permite dictar un curso de derecho empresarial en el BBZ – nuestra Berufsschule – trabajo que me ofrecieron, por segunda vez, gracias al valor agregado de hablar alemán y ser exalumna del Humboldt.
Debo resaltar que el feedback que recibo de los alumnos del BBZ (la mayoría de los cuales practica en empresas peruano-alemanas), enriquece mi vida profesional: son sumamente críticos y exigentes, cuestionan con argumentos. Enseñar a estos chicos constituye un reto diario y, a pesar de hacerlo desde hace 19 años, nunca dejan de sorprenderme sus preguntas y comentarios. Me gusta tanto lo que hago, que me habría encantado que mis hijos fueran abogados, pero sus habilidades los llevaron por otros caminos: uno es físico y el otro músico. Y los tres somos inmensamente felices con nuestras ocupaciones.