“Life is what happens while you’re busy making other plans”
John Lennon “Beautiful boy”
En estos tiempos inimaginables en tales dimensiones hace apenas unos meses, debemos replantear muchas relaciones que dábamos por sentadas con naturalidad de antemano. Un par de conceptos se reorientan, en este sentido, “solidaridad” y “responsabilidad”.En nuestro ámbito educativo, “solidaridad” no solo se representa con cuestiones de ayuda económica, sino con una capacidad de comprender y ayudar al que le falló la conectividad, al que no comprende de aplicaciones, al que se siente ajeno y marginado por los conceptos de la tecnología remota a la que hay que echar mano, al que le cuesta entender una clase a distancia.
Solidaridad implica empatía, mucha empatía, medida en los segundos en que tarda en llegar un mensaje a otro, en que se desplaza nuestra voz a los demás. Y, por el otro lado, la responsabilidad se encuentra hoy más que nunca con el peso de la verdad en nuestras manos. La responsabilidad de hacer clases pesa tanto como la responsabilidad de estudiar, de no plagiar en la evasión del control directo, de desarrollar las tareas en el momento indicado, de mantener la verdad orientada a entender que el beneficio de la educación recae en uno mismo directamente proporcional a través del esfuerzo propio. Solidaridad y responsabilidad se refuerzan en esta época de cambios impuestos y aprendizaje de una nueva normalidad.
Luis Landa
Profesor